Hayao Miyazaki: La belleza como derecho

FUENTE: http://www.radiotierra.info
Por Rosario Puga


Hay creadores  que  se sitúan en la defensa de la belleza como derecho. Son hombres y mujeres que potencian la producción y el  acceso a la belleza como experiencia no sólo de los sentidos también del acto comunicativo. Muchos desafían la antigua concepción marxista de que la belleza o la dimensión estética no puede hacer válido ningún principio de la realidad.

Para los revolucionarios de antaño el problema central era que la imaginación, que es la facultad mental constitutiva de la belleza hacia que el campo de la estética fuera esencialmente «irrealista»: o sea liberado del  principio de la realidad al precio de carecer de efectividad en la realidad. Entendida como derecho la estètica no intenta imponer un estatus de lo bello como convención y tampoco se refugia en la producción artística clásica, invade el centro mismo de la cultura de masa y de la producción del arte industria y ahí pone la cuestión de la conciencia.

Propugna la aparición transparente de receptor, del ojo que ve. Como dice Pier Paolo Passollini "El ojo mira… es el único que puede percibir la belleza… la belleza se ve porque está viva, y por lo tanto es real. Digamos, mejor, que puede suceder que la veamos". Esa intención está en todas las escrituras que elaboran lo real para ser visto incluso desde la escritura fantástica.

Esa lucha ha estado desde siempre en el trabajo de Hayao Miyazaki uno de los más grandes animadores japonés actuales. Un hombre  que ha basado su trabajo en el canon estético como soporte de una reflexión de profunda sinceridad.

Miyazaki ha dedicado su vida a la producción para niños (as) y ha creado universo enteros que sólo pueden  compararse con los mundos creados por Moebius, ese otro gigante del comic  que  creo universos con ribetes existenciales. Ambos son referentes obligados para  buscar los trazos de la belleza como  derecho en  la cultura moderna .Ambos  creen firmemente en la belleza como categoría subyacente al conflicto del  bien y mal. Ambos, narradores expertos prefieren la masa como destino final del acto creativo.

En el caso  de Miyasaki son muchas sus razones “para hablar”,”todas referidas al mundo moderno narrado en universos atemporales, que ponen el desastre ecológico,la dominación del capital, la perdida de la identidad como tópicos  para niños y niñas. Director de populares filmes de animación como El viaje de Chihiro, La princesa Mononoke, Mi vecino Totoro, El castillo ambulante es conocido por su antigua militancia en el PC japonés,ecologista radical  es un pacificista activo que ha visto la modernidad de Japón con  preocupación y  ha  recreado desde sus propios recuerdos de infancia los valores desaparecidos a instancias de una occidentalización de valores y formas de vida donde la humanidad parece siempre cuestionada.

Comparó la crisis de la Planta Nuclear de Fukushima  con el fuego incontrolable que los humanos recibieron del dios griego Prometeo. Luego en junio, su empresa colgó un cartel que decía "Studio Ghibli quiere hacer películas con electricidad que no provenga de las plantas nucleares." Actualmente trabaja  en la creación de una película sobre el desastre en la que intentará algo más realista sobre el Japón que sobrelleva el problema de Fukushima.
Algunas de sus películas muestran una imagen idealizada de la clase obrera y aunque  ya no se considera marxista la cuestión de la dominación del hombre por el hombre,del hombre sobre la naturaleza  son los soportes centrales de las historias que maravillaran al mundo entero .

En la era de la animación digital sigue apegado al dibujo y el storyboard que le permite una acabada creación de atmósferas y personajes que no sólo logran emocionar  también  ponen códigos estéticos lleno de  sentido porque logran una experiencia sensorial única. Al respecto en una entrevista con Financial Times dijo: "es muy importante para mí retener la proporción correcta entre funcionamiento a mano y el ordenador. He aprendido a usar a ambos y todavía ser capaz de llamar mis películas mías”.

Sus películas  se refieren  con frecuencia a la transición de la infancia y siempre incluyen a protagonistas femeninas. Sus  tramas son notables por no enfrentar a un héroe con un antagonista poco compasivo. Al respecto ha dicho  que "la heroína se lanza en un lugar donde el bien y mal moran juntos. [...] sobrevive no porque ha destruido el 'mal', vive porque ha adquirido la capacidad de sobrevivir."

Su universo narrativo esta lleno de máquinas voladoras,de ancianas  combativas y mujeres adolescentes. Los dioses japoneses también son elementos que se repiten.La fisonomía de sus personajes gira en torno a la estética del manga y la personificación de animales y objetos es un factor constante. Todos estos elementos pueden verse por ejemplo en El viaje de Chihiro y en La princesa Mononoke dos de sus más importantes largometrajes.

Su fórmula le ha traído importantes galardones, como el Oso de Oro del Festival de Berlín y el Oscar como mejor película de animación.Sin embargo, firme a sus convicciones y a su pacifismo se negó en 2003 a participar de la ceremonia del Oscar, afirmando que no quería visitar a un país responsable de la invasión a Irak.Pese a ello,los norteamericanos han sucumbido ante su genio.En lo famosos estudios Pixar reconocen la influencia de Miyazaki , al punto que el director creativo de la compañía, John Lasseter  es el principal promotor de que sus películas en el mercado occidental.

En una entrevista con New Yorker menciono que la mayor parte de la cultura moderna es "delgada y plena de falsificación" y tal vez por eso en sus universos de ficción se puede distinguir un dominio  de lo real que apela a la conciencia de manera directa y clara. 

Su trabajo puede  verse con el desdén  propio de  cierta cultura por la animación  pero conviene recordar lo que  dijo Passollini sobre  la lucha  por la belleza : “El problema es tener ojos y no saber ver, no mirar lo que sucede. Ojos cerrados. Ojos que ya no ven. Que ya no son curiosos. Que ya no esperan que suceda nada. Quizá porque no creen que la belleza exista”.
En el centro mismo de la fantasía Hayao Miyazaki ha hecho real el derecho a la belleza.