El historiador Gabriel Salazar cuestionó la utilidad de los intentos de los estudiantes por conversar con parlamentarios y el Gobierno como forma de resolver sus demandas.
"Es una pérdida de tiempo conversar con el gobierno y los parlamentarios. Nunca en Chile ha habido participación ciudadana. ¡Jamás de los jamases! No se trata de llamar a la lucha armada, pero sí que la ciudadanía tome el sartén por el mango", argumentó en entrevista con La Tercera.
En la misma, Salazar manifestó que "el mayor problema de los estudiantes es construir una propuesta e imponerla. El año pasado se demostró que la decisión de la dirigencia de dialogar con el gobierno no dio resultados, pues este último finalmente legisló a su pinta. Por tanto, ese canal no tiene sentido".
Sobre el movimiento, el Premio Nacional de Historia manifestó que "vive una transición que no es fácil de resolver, porque implica crear una alternativa política nueva".
Además, agregó que "la irrupción de los secundarios es otra señal de que el movimiento está lejos de haber perdido fuerza".
Factor secundarios: El poder está en la asamblea
El historiador se refirió a la irrupción de los estudiantes secundarios en el escenario político de las últimas semanas, asegurando que "están menos insertos en la lógica estudiantil que los universitarios y más vinculados a la lógica que viven en sus poblaciones. Quien ha vivido la pobreza en su familia mezcla sensación de injusticia con rabia".
"Si escuchas a Gabriel Boric y a Camila Vallejo, ellos no tienen rabia. Ambos son inteligentes y pueden entender, pero tener rabia es algo sicológico", explicó.
Salazar explicó que la relación de los secundarios hacia sus dirigentes es distinta a lo vivido el año pasado con Vallejo y Jackson a la cabeza.
"Veo más bien respeto de parte de los estudiantes hacia sus voceros, pero no en el sentido de seguirlos como líderes. Eso ya no existe en la cultura juvenil. Tiene que ver con un tema de fondo: ahora el poder está radicado en la asamblea".
Críticas al PC y proyecciones sobre éxito del movimiento
El historiador volvió a ser interrogado sobre el rol del Partido Comunista en el actual contexto social y político y aseguró que "está con Dios y con el diablo. Esa es la verdad. El problema del PC es que dice "somos revolucionarios", pero se mete en la jaula del enemigo y se queda ahí. Como están preocupados de tener más diputados y senadores, no van a activar nada en contra del Congreso".
Sobre el futuro de las demandas estudiantiles, Salazar explicó que "la proyección del movimiento apunta a cambios de fondo del modelo neoliberal en Chile, y eso implica un proceso largo. De trabajar con el pueblo. A ojos de historiador, puede tardar cinco o seis años".
El historiador explicó que las aspiraciones de los estudiantes no se van a resolver en lo inmediato y que "mucha gente puede sentirse desilusionada".
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